EL VELO DEL OLVIDO

Hay mucha confusión con respecto a este tema. Mucha. Y lo «peor» es que desde esa confusión se está divulgando, creando más confusión en las almas perdidas que todavía no recuerdan.

Pero cierro mis ojos y me centro totalmente en escuchar lo que viene de adentro, dejo que la mano escriba sola, y hoy te traigo lo que recordé hace muchos años. Pero hay tanto mensaje que debo entregar y no doy abasto…

Tengo que organizar y preparar en este plano físico muchísima información… una Eternidad de información, con las limitaciones de estar demasiado grande metida en este cuerpo tan pequeñito de 1’60 m de altura. Muy pequeño para mí y nada fácil de manejar.

Yo sólo soy un mensajero. Transcribo y traigo información de una parte a otra. De un mundo a otro. De un plano a otro. Hasta donde voy recordando y no olvido, te puedo decir siempre. Y siempre lo he hecho así.

Cada día es una vida.

Si para muchos hoy es imposible recordar lo que han soñado en la última noche…

Si para muchos hoy es imposible recordar lo que comieron ayer… o si comieron…

Este planeta está diseñado para retroalimentar el olvido e impedir que abras los ojos y recuerdes. Y aún recordando, se encarga de intentar que vuelvas a olvidar.

PERO NADA DE ESO OCURRE SI ERES LO BASTANTE FUERTE DE ESPÍRITU Y TE ADENTRAS A ENTRENARLO Y MANTENERLO ENTRENADO.

El espíritu ES. Pero al meterse dentro de esta esfera y de este cuerpo finito se olvida, y al proceso de RECORDAR se le llama «entrenamiento».

Y muchos ni siquiera recuerdan esto, y tampoco recuerdan que no recuerdan; y tampoco recuerdan que están impidiendo que tú puedas recordar y no olvidar. Y tú, durante mucho tiempo tampoco lo recordaste, hasta ahora, que me has llamado.

Y POR ESO ESTOY AQUÍ.

Si para muchos resulta difícil superar aparentes «fracasos» con los que se sienten desbordados emocionalmente y sienten que la vida les puede y con los que no pueden lidiar…

Si para muchos resulta difícil superar rupturas sentimentales, y que buscan a toda costa olvidar y no pueden…

Si en esta vida muchos son tan despistados… y unos no recuerdan lo más básico de lo que han hecho hoy, ¿cómo van a recordar lo que hicieron ayer?

Y hablo del ayer literalmente como ayer. Y «ayer» en el sentido figurado y simbólico de que cada día es una vida para la perspectiva espiritual, para explicarlo de la forma más sencilla posible.

Si muchos no se acuerdan de dónde tienen la mano, o de donde han dejado la cabeza ¿cómo van a recordar nada?

Si muchos no pueden soportar el calvario de procesar mental, emocional, energética y físicamente las rupturas sentimentales por las que han pasado… Las «pérdidas» de personas que han debido vivir, por muertes o «separaciones»…

Las «pérdidas» financieras o materiales…

Si en esta vida no lo pueden soportar, y ya se vuelven locos con eso, ¿cómo podría sorprenderte que ellos mismos hayan querido desconectarse de una vida a otra, porque emocionalmente no lo podían soportar, tanto en el plano físico (suicidio) como en el astral (vuelta a reencarnar)?

Cuando no lo soportan aquí, se suicidan y se van al «otro lado». Como no trascienden, como siguen sin soportar el dolor, tienen que volver a encarnar. Para muchos encarnar es el suicidio desde el otro lado porque saben que no tienen más remedio que escapar hacia este plano, donde es más fácil canalizar el dolor a través del cuerpo; cosa que desde el lado intangible no pueden hacer.

Y así pueden estar infinitas vidas rebotando hasta que lo comprenden. Hasta que comprenden que trascender el suicidio es no evadir más el dolor, aunque se estén volviendo locos. Y sé de lo que hablo. Duele mucho. Las cartas pueden llegar a ser muy jodidas. Sí.

Y ahí es cuando recuerdan y están listos para no volver a olvidar. Y el sufrimiento se disipa.

Durante la transición entre vida y vida, en el umbral tras el paso y rito de la muerte física, cuando descubren y recuerdan otra vez de qué va este sueño, muchos se dan cuenta de muchas cosas que en vida no se habían dado cuenta. Pero no hay ningún «ángel del olvido». No hay ningún ser lo bastante cabrón como para ser «el malo» de la película y que provoque que tú te olvides. Literalmente «te olvides».

Cuando tú estás sufriendo tanto que no lo puedes soportar, lo que quieres es olvidar. Pero eso no se puede porque hay que pasar el trasfondo del dolor e integrar. Y así integras la sombra y la Luz. Porque si olvidas la sombra también olvidarás la Luz, y por lo tanto la razón de lo que eres, de quién eres y de por qué estás dónde estás; ya sea en el planeta Tierra o donde sea. Da igual la línea de tiempo y de plano. O de no tiempo o de no plano.

Entonces ni siquiera es un proceso en el que muchos piden a nadie de una vida a otra olvidar.

No comulgo con el hecho de tanto que dicen sobre que hay guías espirituales, Ángeles y demás historias de las que tanto se habla. También dicen que no hay nada afuera, sino que todo está dentro…

Entonces, ¿por qué mirar a otros dioses, líderes o guías espirituales, aquí o allí? ¿No se supone que siempre están repitiendo hasta la saciedad que eso ya está en ti? ¿No será que es la versión más elevada de ti y del Todo, la que siempre te asiste, ya que todos somos puras proyecciones del Todo?

Entonces, ¿cómo muchos pueden contradecirse tanto y seguir tan ciegos?

Si muchos no pueden con el sufrimiento de lo que ocurre, entre un limbo y otro, e incluso en esta vida, y dentro de cada vida o existencia, son libres desde el libre albedrío de volver a olvidar, una y otra vez…

Simplemente después de la muerte física se produce un reseteo, y cada uno recuerda hasta donde está dispuesto a soportar. ¿Pastilla roja o azul?

Bueno, ¿y si hay más colores y no se ha querido o podido ver más?

Sigo escuchando y transcribiendo.

Debo concentrarme mucho y no distraerme, porque eso falsearía e interrumpiría la información.

No hay ningún cabrón que te esté obligando a que te olvides de quién eres. A no ser que quieras pensarlo. El mundo del no ser te tienta, pero tú tienes el poder de elegir qué haces con lo que pasa. Y el mayor poder es el que la mayoría busca evitar: ACEPTAR METERSE DENTRO DEL DOLOR. Así es como se sale del dolor.

¿Cuántas personas hay que «se provocan» sin saberlo, enfermedades degenerativas desde la falta de conciencia y la creación inconsciente, como por ejemplo, el Alzheimer?

Porque tanto les dolió un evento en su vida que puede que venga de otros planos, intra – útero o transgeneracional, de vidas pasadas – presentes, o de donde sea. Sigue siendo la repetición del trauma. Y sobre todo sigue siendo la repetición de la forma de afrontarlo, que es la evasión. Y a eso le llaman «Alzheimer», e intentan enmascararlo aún más con pastillas porque los propios médicos y psiquiatras son los primeros que no recuerdan.

Las asociaciones, los GAM (Grupos de Ayuda Mutua) y ONGs sobre este tema (y la mayoría de problemas del mundo, por no decir que todos) hasta la fecha en su ignorancia son las primeras que olvidan esto. Y lejos de ayudar, lo único que están haciendo es empantanar todo más. Por más dinero que pidan, no servirá. Porque lo que NECESITAN es CONCIENCIA Y DIRECCIÓN. No más dinero sin la Conciencia de saber moverlo y hacia quién. Suelen dirigirlo hacia personas que no tienen ni idea.

Si tú no puedes soportar ya el sufrimiento de lo que ha ocurrido en esta vida, ¿cómo vas a poder estar listo o lista para poder soportar lo que has vivido a lo largo de todas tus existencias «pasadas»?

Porque también esas existencias están ocurriendo en otros planos al mismo tiempo que ahora.

Si no puedes con ese sufrimiento porque no cuentas con las herramientas de procesamiento, lo más sencillo es que te pueda más el dolor y automáticamente se implante el olvido en ti.

La memoria en cualquiera de los planos no distingue. Si olvidas lo que te hace daño, también olvidarás lo que te provoca placer.

Si no olvidas el sufrimiento tampoco olvidarás el placer.

Sólo puedes elegir una de esas dos rutas. Si no evades el sufrimiento poco a poco te conducirá hacia la comprensión de la Conciencia.

La memoria también se entrena.

Yo recuerdo todos mis sueños, e incluso puedo operar dentro de ellos a voluntad, entrar y salir de ellos cuando quiera.

Cuando no puedes hacer eso se le llama pesadilla y te fuerzas a despertarte. Y en ese proceso muchos se quedan atrapados en la «parálisis del sueño».

¿Quién te dice que no ocurre lo mismo en esta vida que es un sueño? Para muchos esta existencia es toda una parálisis.

Las personas que recuerdan todo, recuerdan todo. Da igual lo que les pongas. Aunque les duela siempre valoran la parte que no duele, y transforman la que duele.

Las personas que no recuerdan nada, no recuerdan nada. Da igual lo que les eches. Les duele y por eso nunca ven las cosas que no duelen, y se enganchan en lo que duele, intentando taparlo constantemente y por eso necesitan tanta coraza.

Si en esta vida ya no recuerdas tantas cosas y te olvidas de tantas cosas, ¿cómo vas a recordar lo que ha pasado o está pasando en otras realidades de tu Avatar?

Para hacer eso hay que echarle un buen par de cojones y de ovarios. Tendrás que adentrarte en la vulnerabilidad, no huir del dolor ni del sufrimiento, aprender a transformarlo, tendrás que coger la ola según venga y aprender a mantenerte en ella. Tendrás que atreverte a perder, o a lo que significa para muchos en este mundo lo que es «perder», aunque tú sepas que en el terreno espiritual vas primero.

Tendrás que revisar mucho e ir hacia atrás, para descubrir cosas y así será como vayas hacia adelante; mientras en este plano material de apariencias verás cómo todos creyendo que van hacia adelante están totalmente atascados hacia atrás, y se pasarán una eternidad de vidas atrapados, sin poder salir de ese samsara.

Tú eliges hasta dónde puedes soportar. No sólo en la muerte sino a cada momento. No es necesario esperar de una vida a otra para dejar que el velo del olvido se instale. Lo que hay que aprender a no olvidar es por qué este velo se instala, la razón que tiene de estar ahí, y cómo puedes ir poco a poco desmantelándolo. A eso se le llama abrir los ojos, y posteriormente estar despierto. Y posteriormente mantenerse despierto.

No pretendas olvidar a una ex pareja. No pretendas no dar valor a los «casi algo», sólo porque provocó mucho dolor. Deberás aprender a pasar ese dolor hasta que puedas desear lo mejor a todas esas personas al mismo tiempo que a ti mism@. A comprender que no siempre aparecieron por resonancia, sino porque el Ser te lleva al pozo más oscuro y más hondo, para ver cómo reaccionas cuando todas las luces se apagan. Para ver cómo le dejas al propio Ser manifestarse a través de ti en lo que tú se lo permites, y llegar al punto de recordarse y no olvidarse en esa Luz que es a través de esta experiencia terrenal donde casi todo es oscuridad. A eso se refieren cuando dicen que tú mismo te estás poniendo a prueba. Y luego cuando el velo del olvido se va y ha pasado esta experiencia de vida, te cagas en todo porque te has dado cuenta de que has vuelto a evadir y tienes que regresar para volver a recordar.

Las vidas pasadas y terapias similares no sirven de nada si por otro lado se intenta forzar el olvido de lo que ocurre en esta.

Lo que sigue ocurriendo en esta es reflejo del nivel evolutivo presente y por lo tanto no tiene sentido caer en la trampa de quedarse enganchado en todas las terapias habidas y por haber. Las terapias están para ayudar a recordar, pero no para quedarse atrapado en ellas. Atención con esto.

Estás a un paso de retirar el velo del olvido en cualquier situación. No es necesario creer que hay que esperar a la muerte física para darse cuenta de esto.

Yo puedo recordar muchas cosas porque no las he olvidado, porque en mi gestación me quedé a medias. Porque no llegué a la mitad del embarazo y no llegué a impregnarme con la contaminación terrenal de este planeta. Físicamente estuve en mucho peligro de vida con los medios que había en esa época, pero espiritualmente traía la fuerza y mantenía el recuerdo de lo que muchos no. Trabajo como Mensajero y Enlazador de Mundos.

No siempre las cosas llegan por ley de atracción o por resonancia. El Ser (o sea la versión más alta de ti) te va a llevar hasta lo más hondo, profundo, bajo y oscuro. No importa lo que hagas. Está diseñado así. De eso va este sueño. Y tú mismo también decides lo que recuerdas y lo que olvidas.

Cuanto más intentes olvidar, más grande se hará esa sombra. En esta vida, o de una vida a otra. ¿Qué más da?

¿De verdad quieres salir?

No intentes salir.

¿De verdad quieres ganar?

No intentes ganar.

¿De verdad quieres recordar y no olvidar?

Permanece abiert@ a estar dispuesto a recordar todo, con todo lo que venga.

Así es como se trasciende. Aquí y ahora.

En esa sensible vulnerabilidad encontrarás la fuerza.

El Alma conduce a través de ti.

Deja que lo haga, aunque muchas veces tengas miedo.

Tu Ser te va llevando a través de un fractal. Deja que lo haga, aunque te topes con cosas que duelan.